El Bootstrapping es una estrategia de financiamiento que se ha convertido en una alternativa viable para los que hacemos emprendimiento y que buscamos mantener la sanidad financiera en la realización de los mismos. Este tipo de financiación implica el uso de recursos propios y los ingresos generados por la empresa para financiar su crecimiento, en lugar de depender de inversiones externas o préstamos.

El término proviene de la expresión “tirarse hacia arriba por los cordones de las botas”, lo que implica un esfuerzo personal y directo para superar las dificultades. Esta técnica de arranque de negocio se basa en el empleo eficiente de los recursos disponibles y el resultado de las ventas de los productos y servicios de la empresa.

Una de las principales ventajas, es que nos permite a los emprendedores mantener el control total de su empresa. Al no dar entrada a inversores externos, se evita la dilución de la propiedad y se retiene una mayor participación en la empresa. Esto resulta especialmente valioso cuando el negocio comienza a ofrecer beneficios, y a que se puede disfrutar de los frutos de su trabajo sin tener que compartirlos con inversores externos.

Aplicar este modelo de negocio es un viaje hacia la autosuficiencia financiera, donde cada paso que das está alimentado por la visión y la tenacidad. Comienza con una idea clara y una pasión por verla realizada, sabiendo que cada recurso que inviertes proviene de tu propio bolsillo o de los ingresos generados por tu empresa. Este camino te obliga a ser creativo, a encontrar soluciones innovadoras que no dependan de un gran capital, sino de tu ingenio y capacidad para maximizar lo que ya tienes.

En este proceso, la prudencia es tu mejor aliada. Cada decisión financiera debe ser sopesada y cada inversión, por pequeña que sea, debe considerarse cuidadosamente en términos de retorno potencial. La disciplina en el manejo del flujo de caja se convierte en una práctica diaria, ya que cada centavo cuenta y el objetivo es mantener la empresa en movimiento y creciendo de manera sostenible.

La clave es la adaptabilidad. En lugar de seguir un plan rígido, debes estar listo para pivotar y adaptarte a las circunstancias cambiantes. Esto puede significar ajustar tu modelo de negocio, explorar nuevos mercados o redefinir tu oferta de productos para satisfacer las necesidades emergentes de tus clientes. La flexibilidad te permite responder rápidamente a los desafíos y aprovechar las oportunidades a medida que surgen.

También implica un enfoque en el crecimiento orgánico. En lugar de buscar un crecimiento explosivo financiado por deuda o inversores, te centras en construir una base sólida de clientes leales y en aumentar las ventas paso a paso. Este enfoque te permite construir una empresa robusta y resistente, una que se sostiene por sí misma y que no está sujeta a las presiones de los acreedores o las expectativas de los inversores.

La venta y el marketing se convierten en el motor de tu negocio. Sin un gran presupuesto para publicidad, debes ser astuto y aprovechar todas las herramientas de bajo costo y gratuitas disponibles, como las redes sociales y el marketing de contenidos. La meta es crear una marca fuerte y una presencia en línea que atraiga a los clientes y genere ventas sin un gran gasto de capital.

El bootstrapping no es solo una estrategia financiera, es una mentalidad. Requiere una dedicación total al negocio y una creencia inquebrantable en tu capacidad para hacerlo prosperar. Es un compromiso con la idea de que, con el trabajo duro y la determinación, puedes construir algo valioso y duradero.

Así mismo te enseña la importancia de la paciencia. Los resultados pueden no ser inmediatos, pero con el tiempo, la inversión en tu visión y en tu negocio dará sus frutos. Es un recordatorio de que el éxito verdadero y sostenible se construye con el tiempo, a través de decisiones inteligentes, trabajo duro y una firme creencia en tu capacidad para triunfar.

Desde que creé a Biofile en 2016, tomé la decisión y elegí este modo de financiamiento con recursos propios. Así, con la reinversión de ganancias, la empresa ha logrado un crecimiento sostenible y adaptativo. Este enfoque nos ha permitido estar en constante crecimiento.

En este proceso, cada pequeño éxito se celebra y se reinvierte en el negocio. Las ganancias no se ven como una oportunidad para el gasto personal, sino como el combustible para la próxima etapa de crecimiento. Esta reinversión constante es lo que permite que tu negocio evolucione y se expanda de manera orgánica, fortaleciendo su posición en el mercado.

Dorian

por Dorian Ferney Rallón Galvis

Profesional en Ingeniería de Sistemas de la Universidad Cooperativa de Colombia sede Bucaramanga y reconocido empresario santandereano, emprendedor y soñador que a través de la experiencia se ha convertido en un referente en innovación digital. Fundador y CEO de Biofile: suite profesional para prestadores de salud.