La autogestión en las empresas es un concepto que ha ganado relevancia en las últimas décadas, especialmente en el contexto de un mercado laboral que valora cada vez más la agilidad y la capacidad de adaptación. implica que los individuos o equipos dentro de una organización asumen la responsabilidad de gestionar su trabajo, lo que incluye la planificación, programación, organización y control de las tareas relacionadas con su rol. Este enfoque promueve la autonomía y la responsabilidad en nuestros trabajadores, permitiendo a los equipos tomar decisiones sobre la gestión de proyectos, la resolución de problemas y la formulación de estrategias sin la necesidad de una supervisión constante.

Los equipos autogestionados se caracterizan por su diversidad de habilidades y conocimientos; operan con un alto grado de interdependencia para alcanzar objetivos comunes. Como directivos podemos motivar a nuestros empleados con lecturas diarias que les ayuden a crear una cultura de la autogestión en las organizaciones, destacando sus beneficios: como el aumento de la motivación, la mejora en la toma de decisiones y la mayor satisfacción laboral.

Su implementación en la empresa puede incluir medidas que en los últimos años han dado grandes resultados en espacios como el teletrabajo. Es importante destacar que no conduce a la autocracia; por el contrario, como CEOS o directivos podemos diseñar estructuras y mecanismos de coordinación que contribuyan con el funcionamiento armónico en los diferentes procesos y tareas asignadas.

De igual forma, tampoco implica que desaparezca el consenso en la toma de decisiones, sino que hay que basarla en un modelo en donde nos pidan consejo y así que se tomen decisiones informadas. Esta forma de gestión otorga a nuestros trabajadores mayor participación en las decisiones y les permite llevar a cabo tareas de administración y organizarse con un mayor grado de libertad y responsabilidad.

Por otro lado, para implementar una buena cultura debemos afrontar desafíos que pueden requerir inversión en capacitación y tecnologías con el fin de que se dé una transición en pro del cambio en la cultura organizativa y en una revaluación de las dinámicas de poder, lo que debemos cuidar para no generar resistencia entre los empleados y los directivos. Nuestros empleados deben estar bien capacitados y contar con las habilidades necesarias para gestionar su trabajo de manera independiente. Esto incluye la planificación, organización y ejecución de tareas, así como el desarrollo de habilidades de liderazgo para la toma de decisiones.

Además, es importante que fomentemos la adopción de nuevas tecnologías para el desarrollo de las tareas diarias de cada trabajador fomentando la innovación, en un entorno donde la creatividad es valorada, permitiéndoles explorar nuevas ideas y soluciones a los problemas de manera más libre, disminuyendo las restricciones jerárquicas.

Así mismo, es crucial que podamos dar constantemente confianza y libertad al equipo de trabajo, asegurando que todos tengan claridad en el grado de su responsabilidad, facilitándoles herramientas para que controlen asertivamente sus acciones, buscando el equilibrio en donde la creatividad es valorada al permitir que exploren nuevas ideas, generen nuevas soluciones y con esto finalmente lograremos un beneficio de doble vía, en donde somos más conscientes que la autogestión impulsa el éxito personal y empresarial.

Dorian

por Dorian Ferney Rallón Galvis

Profesional en Ingeniería de Sistemas de la Universidad Cooperativa de Colombia sede Bucaramanga y reconocido empresario santandereano, emprendedor y soñador que a través de la experiencia se ha convertido en un referente en innovación digital. Fundador y CEO de Biofile: suite profesional para prestadores de salud.